Ramón asumió en el Rojo y promete retoques ya para levantar. Dijo que le gusta "el desafío", explicó por qué arrancó un martes 13, le pidió apoyo a la gente y dejó un mensaje para el plantel: "No me gustó que los jugadores no saludaran a todos los hinchas".
Se hizo esperar hasta que apareció. Después de una presentación a puertas cerradas, de una práctica en la que conoció a sus nuevos jugadores, Ramón volvió. Y habló como técnico de Independiente, y acompañado por Julio Comparada posó con la camiseta de Independiente. Habló de todo lo que le preguntaron y así arrancó, éstas fueron sus primeras palabras en público como DT del tercer grande que dirige: "Buenos días, los escucho. Bah, voy a hacer una introducción para agradecer al presidente, a toda la CD por la confianza y la posibilidad de trabajar. Este desafío me gusta porque es una gran institución, con prestigio, con cosas obtenidas. Hace muy poquito viene de ganar una copa que era muy importante. Y quiero tener el reconocimiento por el Turco (Mohamed) porque hizo un buen trabajo y le dio una copa importante. A veces no se te da como uno quiere y tomó la decisión. Le agradezco a él y al club. Lo primero que quiero es trabajar, hablar con los jugadores".
Después de un tiempo mirando desde desde afuera, sufriendo por el descenso de River como hincha, dejó en claro que ya el viernes, en el debut, se verá su mano en el equipo. "Hay jugadores de categoría, de nivel, es un grupo que hay que reacomodarlo anímicamente y hay que empezar a hacerlo. Han jugado en distintos equipos y hay que recomponerlo. Mucho no vamos a cambiar, pero algunos toquecitos van a notar en el primer partido (contra Colón, viernes a las 17.10). Todo lo que pasó hay que dejarlo de lado. Hay que hacer cambio rotundo. El viernes vamos a hacer algo diferente, no voy a despreciar lo que hicieron los otros entrenadores. Además hablaré con Mohamed, le podría preguntar por qué tuvo tanta dificultad, tanto inconveniente, qué problemas tuvo. Voy a hacer todas las evaluaciones necesarias. Hay partidos de copa, tenemos un calendario apretado en estas dos semanas. No podemos errarle en la evaluación. Los tiempos son muy cortos, jugamos viernes, miércoles. Hay que trabajar mucho aunque no sea doble turno".
Marcó su autoexigencia diciendo que "quiero entrar en la historia de este club que ya ha ganado cosas" y también le hizo su pedido a la gente, valorando el apoyo que vio en Córdoba, en la derrota con Belgrano. "Le quiero mandar un mensaje de que el primer exigente de que se juegue bien soy yo. Me gusta que la gente sea exigente y que nos acompañe. Si son exigentes y no acompaña es distinto. Hay que hacerlo en conjunto entre jugadores, dirigentes, hinchas. Me sorprendió cómo acompañó el partido de Córdoba, necesitamos el apoyo de la gente. Equipo que agarro, me gusta estar en la historia, ojalá le dé satisfacción a la gente. Eso queremos, un equipo competitivo para tener satisfacciones". Eso sí, dejó bien en claro que "no me gustó que los jugadores no saludaran a la gente en medio de los problemas con la barra".
Fue un martes 13 el día del arranque de Ramón. Día al que le puso una sonrisa y que tuvo su explicación, demostrando que está metido en los detalles: "Les quiero contar que es un día especial para mí, porque yo debuté un 13 de agosto. Es un número que quiero muchísimo".
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