Su nombre aparece en la lista de probables refuerzos cada vez que llega un nuevo receso. Su vuelta es un deseo permanente de todos los hinchas, y no es para menos. Porque Carlos Luna dejó en Tigre una huella difícil de borrar. Y después de varias chances de regreso frustradas, en esta oportunidad parece que esa ilusión se convertirá en realidad. El Chino está muy cerca de regresar al club en el que es ídolo. El delantero, de 29 años, ya tiene arreglada de palabra su llegada al equipo de Victoria. Para concretar su arribo, sólo resta que su representante (ya viajó a Ecuador) se reúna con las autoridades de Liga de Quito, el club dueño del pase, y haga válido el acuerdo por el préstamo por un año del jugador.
Así, el delantero que consiguió el ascenso al Nacional B siendo goleador del Matador, se estaría sumando al grupo el próximo fin de semana para comenzar a trabajar bajo las ordenes del DT Arruabarrena.
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