Ya no está. Se fue. Eligió irse lo más lejos posible, tomarse las vacaciones más largas de su vida para no sufrir. Sabía que recién iba a comenzar a sentirse un ex cuando sus compañeros terminaran las vacaciones y retomaran los entrenamientos. Ya no está Martín Palermo. Las islas de Cerdeña y Capri, en Italia, lo tienen recostado en sus playas. Lejos del fútbol. Y en Boca ya lo extrañan.
Todavía no empezó el campeonato ni hubo amistosos. Apenas dos semanas de pretemporada en Brasil y una de trabajo en Casa Amarilla. Recién la semana que viene, primero en Barcelona y luego en Londres, el nuevo Boca saldrá al ruedo. Pero después de cuatro ensayos en cinco días, ya hay una preocupación: el poco gol que tiene este equipo. Entre los 11 que puso durante esta semana, apenas sumaron diez goles el semestre pasado.
La ausencia de Palermo, sin embargo, es el símbolo de un cuadro de situación que excede a su sucesión. La 9 ya es de Viatri y, aunque es goleador y lo demostró en el Apertura 08, su estilo lo lleva a salir demasiado del área. Y no a todos les gusta que baje a buscar tanto la pelota. Con Cvitanich, además, funcionan como un doble 9, a uno y otro lado de la medialuna del área. “Se están conociendo y eso es importante para que cuando hace un movimiento, el compañero lo entienda y pueda habilitarlo”, explicó el técnico, quien no renuncia a Santiago Silva.
Por esta nueva dupla que se está conformando es que Falcioni ayer paró el entrenamiento varias veces, principalmente para explicarles a Viatri y Cvitanich que cuando uno se muestra para recibir de espaldas, el otro debe picar en diagonal hacia afuera en busca del pase largo. También detuvo el ensayo para mostrarles a Clemente y Erviti cómo tenían que tocar. “Hay que buscar los espacios y encontrarlos”, dijo, y reclamó dos pases cortos y uno largo.
No está en el ataque el único problema de la falta de gol. El resto de la formación aporta muy poco y, así como con Erviti gana posesión y distribución, sin Colazo pierde profundidad por el sector izquierdo (hizo tres goles en el Clausura). Encima, cuando Erviti se cierra como doble 5, Clemente no se muestra seguido por la banda... Y sin Chávez en la derecha, son otros dos goles que faltan. Es decir: entraron dos que suman un gol y salieron dos que habían aportado cinco. Pero ésta es una decisión del técnico, no forzada como el retiro del goleador. “Lo de los volantes lo estamos evaluando, vamos a definir en la semana previa al torneo”, comentó sobre las dudas Chávez / Rivero y Colazo / Erviti.
“Hicimos fútbol todos los días y vamos a volver a hacer mañana (por hoy) para que el equipo se vaya soltando, sea dinámico y más agresivo”, explicó el DT. Y luego agregó: “En los entrenamientos de la semana buscamos la forma de romper a la defensa rival, de buscar espacios y encontrarlos. Aunque algunas veces se haya llegado al gol y otras no”. En el ensayo de ayer, de casi una hora, los goles los aportaron Riquelme y Erviti.
Falcioni sabe que debe encontrar esa cuota goleadora que pierde sin Palermo, pero también sin Chávez y Colazo. Su ideal es Vélez, con casi dos goles a favor por partido y menos de uno en contra. “Para ser protagonista desde el comienzo hay que tener equilibrio de juego en defensa y en ataque”, completó. Y en esa búsqueda anda: más goles en un arco y menos en el otro.
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