Fede Insúa metió dos goles y fue otra vez la figura de Vélez. “Es todo gracias al equipo”, aseguró.
Sonríe. El Pocho Insúa no puede ocultar su felicidad. Y no es para menos. Nuevamente, como lo había hecho hace poco menos de una semana ante Banfield en el triunfo 4-0, la rompió. Lo único que cambió fue el rival. Esta vez el que padeció lo lujos del ex Boca fue Chivas. Y lo sufrió en su máxima expresión: dos goles (suma el tercero en Vélez en cuatro partidos jugados, dos como titular). “Todo lo que hago se lo debo a mis compañeros. Es una alegría enorme pertenercer a un equipo que tiene esta actitud”, contó el Pocho, quien llegó a Liniers para reforzar el plantel y está cumpliendo su tarea a la perfección: “Me tocó convertir a mí, pero la realidad es que llegamos todos al área rival. El equipo juega bárbaro”.
El jugador surgido en Argentinos Juniors se muestra admirado ante el volumen de juego que tiene Vélez y por eso se anima a aspirar a todo en este semestre. “Tenemos la idea de pelear todo hasta el final, es la realidad. Lo bueno es que el equipo siempre mantiene la humildad”, soñó el enganche. Vélez va por buen camino y el Pocho lleva el estandarte.
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