Esta noche alcanzará el récord de su amigo el 10: 66 partidos en Copas. El lateral ya es un referente pero la vive con idéntica ilusión: "Es un sueño".
Fue en el 2001. Tenía pelo, unos rulos pegaditos a la cabeza que él alguna vez definió parecidos a los de Cafú. Se había ido Arruabarrena y él estaba destinado a ser el sucesor, número 3 con nombre propio, dueño del puesto en toda conquista de América que viniera después. Clemente Juan Rodríguez miraba con timidez a los grandes en ese momento, siempre a lo lejos. Córdoba, Ibarra, Bermúdez, Serna, Delgado, Guillermo, su amigo Riquelme. El mismo Bianchi como técnico. No se imaginaba que algún día llegaría a convertirse en referente copero, en el jugador con más partidos de Libertadores de la historia del club, que jugaría seis ediciones y llegaría a la final en cinco. “Pasan los años, cada vez falta menos, se va acabando esto y se disfruta más”, dice con seriedad a sus 32 años, y enseguida deja escapar una risa. Esta noche, contra el Toluca, en el debut en la 2013, igualará el récord de Román de 66 partidos en Libertadores y también comenzará el camino hacia su sexta final...
-¿Qué recordás de tus primeros partidos coperos?
-Lo primero que te acordás es que es un momento lindo, los nervios que pasás por más que trates de estar tranquilo. Es muy lindo jugar una Libertadores, es un sueño.
-¿Tenés presente cuál fue tu primer partido?
-Ah, es difícil. Fue en la Copa del 2001 (NdeR: 21/2/01, 2-0 a Oriente Petrolero), porque en la del 2000 estaba en el club, pero recién llegaba a Boca y todavía no jugaba. Igual, ya me ilusionaba con jugarla algún día. Y gracias a Dios la pude jugar y ganar varias veces.
-¿Cuál disfrutaste más de todas las que ganaste?
-Las tres que gané, todas se disfrutan. Pero la del 2003, que después se ganó en Japón, es la más especial. Ese año, además, logramos el torneo Apertura. Fueron tres títulos. Nunca me olvido de eso.
-¿Qué consejo le podrías dar a un compañero que no tiene tanta experiencia? ¿Cómo se juega un partido de Copa?
-Alguno puede tener menos partidos, otros la jugaron y la ganaron... Es muy lindo, es único, es importante y lo tenés que disfrutar dentro del campo de juego. No hay nada más lindo que jugar una Libertadores y ganarla con Boca, que es un club único, con la gente que se vuelve loca, es impresionante y te da fuerzas dentro del campo de juego.
-¿Te imaginabas sumar esta cantidad de partidos por Libertadores?
-No, estoy contento de sumar muchos partidos de Copa Libertadores y lo disfruto. Por los años, cada vez disfruto más de esas cosas, ja.
-Lo vas a alcanzar a Román y si no vuelve pronto, le vas a sacar alguna ventaja...
-Jaja, tal vez sí. Voy a sumar estos partidos que me tocan jugar, pero ojalá que él pueda estar pronto. A Román le gusta mucho jugar la Libertadores.
Clemente y Román no son dos compañeros más. Lo primero que hizo el lunes el 10 cuando entró al campo de juego fue llevar su mano derecha a la bocha del número 3, como tratando de sacarle brillo, de lustrarla. Bromean con ser alguna vez técnico y ayudante de campo, con los roles muy poco claros. Se regalan elogios mutuamente: suele decir Riquelme que el mejor jugador del equipo es su amigo, que va y viene por el lateral. Son así, amigotes y referentes del Boca de Bianchi. “Cuando me vio el lunes, hicimos algunos chistes que siempre hacemos. El se reía, me cargó, hablamos. Lo vi bien y muy contento. Me dio alegría verlo así”, cuenta.
-¿Extrañaste a tu amigo durante todo este tiempo que no estuvo?
-Más allá de que uno podía hablar por teléfono, sí. Es una amistad muy grande. Al no estar en la pretemporada en Tandil, en el día a día, en estos partidos de verano, lo extrañaba. Pero sabía que iba a elegir así, a pesar de tener muchas ofertas, porque nació, ganó y le dio muchas cosas a este club. Me pone muy contento que vaya a ponerse de nuevo la camiseta de Boca.
-¿Es muy importante para ustedes tenerlo en la Copa?
-Román hace jugar al equipo y nosotros lo tenemos que ayudar a él. Si nos ayudamos todos, las cosas nos van a salir bien. Cada vez que a Román le tocó jugar la Libertadores, le fue muy bien.
-¿Qué te dijo Bianchi en estas semanas de trabajo, te marcó o te pidió algo?
-Mucho no charlamos, pero nos conocemos y él sabe lo que puedo aportar a la hora de salir a atacar, de ayudar al equipo, por la velocidad que tengo. Me pide que haga eso, mucho más no.
-¿Te pone límites o te da libertad?
-Tengo libertad, pero a la vez hay que ser inteligente y estar bien parados atrás, pasar cuando tengo la oportunidad y aprovecharla, más en los últimos minutos. Hay que ser inteligente.
-¿Qué significa tener de nuevo a un técnico así, con el que empezaste y que ganó tanto?
-Es importante. Carlos es una gran persona y la verdad es que te motiva mucho que te dirija, que esté ahí en el banco me da ganas de entrar al campo y dejar todo.
-Con el equipo que tienen, con Bianchi y con Riquelme, ¿te ilusionás con tu sexta final y con tener revancha por lo del año pasado?
-Seguro, es lindo jugar la Copa y ganarla. Lo sueño. Pero tenemos que jugar, empezar bien y sumar tres puntos. Luchar el campeonato y la Copa sería lindo, pero tenemos que ir de a poquito.
-Tenés ocho títulos en Boca, ¿que más te gustaría conseguir?
-Creo que Boca me dio mucho y yo sueño con seguir ganando cosas, campeonatos y copas. Ojalá a mitad de año podamos festejar por lo menos una de las dos cosas.
Fuente: Ole
Editado por Pelu Gomez
@peludariogomez
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