San Lorenzo: Sanfilippo,disparó contra varios personajes del club.

Fiel a su estilo verborrágico y sin pelos en la lengua, el máximo artillero de la historia de la institución de Boedo cargó duramente contra Leandro Romagnoli, Bernardo Romeo, Héctor Veira y Carlos Abdo. "Yo quiero morirme en el club que me vio nacer, las cosas no las hacía por dinero", explicó



En el programa Soy San Lorenzo, José Sanfilippo tomó la palabra y opinó sobre varios aspectos de la situación del elenco "azulgrana", que vive una complicada situación deportiva (está inmerso en la zona de Promoción) y financiera-económica, con grandes deudas que no permiten dejar en paz a los dirigentes de la comisión directiva.

En primera instancia criticó a los dos ídolos del plantel actual, Leandro Romagnoli y Bernardo Romeo, quienes no han tenido buenas actuaciones en los últimos tiempos y sufrieron demasiado con las lesiones. "Si juega Romagnoli, puedo jugar yo. Es un muchacho que ya tiene problemas físicos y es muy difícil jugar. Para mí, ni él ni Romeo están para jugar en Primera División", sentenció con dureza.

Luego de avisar que "si no cambia, San Lorenzo se las va a ver muy feas en la próxima temporada", se encargó de atender a los integrantes de la Secretaría Técnica de la entidad, que tiene al "Bambino" Veira como su cabeza visible y con la misión de observar jugadores para incorporar. "El club tiene gente que asesora y lo hace muy mal. Cuando vi que Veira y Cocco iban a asesorar a los dirigentes, que siempre saben muy poco de fútbol, me alegré, siempre pensando en gente que iba a trabajar ad honorem. Pero no lo están haciendo de esa manera, cobran mucho dinero, y cuando un jugador que recomiendan ellos fracasa, se tienen que ir del club. Veo que estos dos muchachos siguen eligiendo mal y con un sueldo enorme", lanzó.

Y por último se refirió a la figura de Carlos Abdo, con dolor e impotencia, porque el ídolo "cuervo" estaba trabajando con los más chicos pero fue dejado a un lado. "Yo estaba en las inferiores para enseñarle a los chicos a definir, no hay nadie que tenga mi capacidad. Les marqué un jugador (Leandro Navarro) que le pega con las dos piernas, una maravilla, y no lo ponen. No me gustó que el presidente no me respetara y me mintiera, me dijo que me iba a renovar el contrato por un año y yo le creí... Es de no creer que San Lorenzo me haya hecho semejante barbaridad, yo quiero morirme en el club que me vio nacer, no es algo que yo hacía por dinero", cerró.